Copos de avena germinada – 1000g

Descripción

Avena (Avena sativa)

La avena pertenece a la familia de las gramíneas dulces y, a diferencia de otros cereales, tiene un tallo hueco y una inflorescencia en forma de panícula, y cuenta con una larga tradición como alimento nutritivo.
La forma típica de los copos de avena se crea enrollando los granos de avena.
Los copos de avena no contienen gluten por naturaleza, tienen un amplio espectro de nutrientes y son ricos en fibra soluble.

Hace muchos cientos de años, nuestros antepasados ponían en remojo cereales, legumbres y frutos secos en agua durante toda la noche. El propósito de esto era germinar las semillas. En contacto con el agua, el grano latente se activa. Está a punto de dar lugar a una nueva vida . El secado suave de las semillas germinadas garantiza la conservación de los ingredientes, una larga vida útil, una consistencia agradable y un sabor intenso.

¿Qué ocurre durante la germinación?

La plántula, contenida en la semilla, contiene todo el potencial de la planta. Si la semilla se hincha con agua, multiplica su peso y cobra vida. Se activan las hormonas vegetales y las enzimas, que utilizan y convierten las sustancias almacenadas en el grano (hidratos de carbono, grasas, proteínas). El almidón se convierte en compuestos azucarados, las proteínas en aminoácidos y las grasas en ácidos grasos fácilmente utilizables. El proceso de germinación también produce vitaminas (vitamina C, vitamina E y vitaminas del grupo B) y ácidos grasos omega-3. Las sustancias que inhiben la digestión (por ejemplo, el ácido fítico) o son tóxicas se descomponen durante el proceso de germinación. Las semillas germinadas se toleran muy bien y no se perciben como pesadas en el estómago y los intestinos, incluso en grandes cantidades.

La importante cantidad de fibra contenida en la dieta, combinada con abundantes líquidos y ejercicio moderado, contribuye al funcionamiento normal del intestino . Por otra parte, una dieta rica en fibra ayuda a mantener niveles normales de colesterol, contribuye a la saciedad y regula los niveles de azúcar en sangre y los antojos asociados.